Montellano – Castillo de Cote – Montellano (29 Diciembre 2013)

Montellano (Sevilla)

Domingo 29 de diciembre de 2013.-

A eso de las 8:30 horas nos concentramos en un coche Gabriel Rodríguez y José María García con sus respectivas Antonia María Pérez y Ana Mari Gómez y en otro Juan Eslava y Paco Sánchez para emprender el camino hacia Montellano situado a 65 km de Carmona, aunque como nos fuimos por la SE-40 la distancia se elevó a 86 km, pero tardamos el mismo tiempo previsto 1 hora.

Aparcamos en la calle Martín Salazar y pasamos a desayunar a un bar nuevo situado en la esquina de dicha calle con la calle Ronda (buen aceite y buena pringue para el que quiso con un preciado mollete). Empezamos nuestro cometido de caminar por la Calle Ronda en dirección a la carretera de Coripe, y una vez pasamos por el Colegio del Sagrado Corazón y la Cooperativa, continuamos por la Avenida del Tesorillo hasta llegar a la ultima nave donde tres hombres tomaban el sol, convirtiéndose el asfalto en camino que empieza a adentrarnos en el bosque de pinos, eucaliptos, acebuches, etc.,, pero enseguida giramos a la derecha para coger el camino que nos conduce por la Sierra de San Pablo, siempre ascendiendo con una inclinación mas o menos suave y por sendero de un principio y por caminos forestal posteriormente que nos obliga a pararnos en un mirador donde se puede disfrutar por un lado de las vistas del pueblo, y también de otros pueblos que conocemos gracias a las múltiples rutas que hemos realizado a Grazalema, así divisamos claramente a Puerto Serrano, Algodonales, Villamartin y el Pantano de Bornos, Zahara y el pantano, el Zamafragón y hasta Olvera como dijo Ana Mari… y finalmente que alegría hemos llegado a lo alto donde está la torreta del vigía forestal, y vemos el esplendido y aunque pequeño majestuoso Castillo de Cote. Pero ojo el castillo está en otro cerro distinto y lo tenemos por un lado cerca y por otro lejos, pues ahora toca bajar desde los 526 metros de altitud hasta los 412 donde se encuentra la entrada al sendero del castillo. La bajada se realiza bien, con cuidado pero bien, estando en todo momento señalizada con piedras a los lados; a medio camino nos encontramos el corte de una cantera de la que extraen piedras para picarlas y servir para el compactado de carreteras, y bajamos junto a la cantera por el camino forestal hasta una cancela… y eso estamos otra vez a 412 metros, pero el castillo está en lo alto de un cerro cuya distancia según el cartel informativo es de 500 metros (lo que siempre decimos: ¿cuanto falta? 500 metros…pero esta vez de verdad) con un desnivel de 100 metros que hay que subir por escalones, sendero con piedras mas o menos sueltas y apoyos en algunos lugares de madera que nos permiten pararnos y disfrutar de las magnificas vistas. Total en unos 20 o 25 minutos todos arriba y quien no llega si un matrimonio con su hijita Lucia de 2 años gateaba mas que El Paco, y no nos va a dejar en ridículo con solo 2 años. Arriba todo es espectacular, la buena construcción, el interior de la capilla y las maravillosas vistas desde lo alto y desde los alrededores. Vistas de 360 grados, desde Moron y su sierra, Grazalema en toda su amplitud, las vegas con distintos cultivos, Marchena, Arahal y hasta Carmona aunque con poca nitidez debido a la niebla lejana. Y como añadido empezaron a salir de la sierra parapentes, primero cinco o seis, después quince o veinte y finalmente no sabemos cuantos y es que el tiempo acompañaba y le dieron un colorido espectacular a nuestra excursión.

Después de un merecido descanso y tomar algo de agua y fruta descendemos por el mismo camino (y Lucia andando también) y volvemos a gatear por el sendero que de nuevo nos lleve a los 526 metros de la torre del vigía forestal. Al llegar dijimos todos !ea se acabaron las cuestas por hoy!, pues no ahí vino una nueva sorpresa de esta ruta, nos encontramos con una fuerte pendiente de bajada de unos 150 no 200 metros pero muy difícil de bajar, muy resbaladiza e imposible sin la ayuda de bastón, pero con paciencia y buscando los buenos apoyos llegamos a la zona donde nace el Arroyo del Tesorillo, donde después de una pequeña subida nos encontramos con un nuevo mirador; pero prácticamente sin descanso continuamos en leve ascenso por la Sierra de Montellano, primero atravesando la parte quemada el año pasado, que parece que se está cubriendo completamente de matorral bajo y siguiendo por la sierra llegamos finalmente a un extenso merendero donde se celebra la romería a San Isidro Labrador. (Este es el lugar ideal para comer cuando vengamos con la asociación) al ser domingo numerosas familias disfrutaban del campo y sus guisos. Nosotros continuamos si llegar al mirador por donde se tiraban los de los parapentes hasta llegar al pueblo de nuevo entrando por la Calle de la Sierra, para continuar por la Calle Hazuela y empalmar con la calle Martín Salazar donde teníamos aparcado los vehículos. ¿Hora? Eran las 15,15 aproximadamente osease 5 horitas con sus paraditas por eso de las cuestas. Dejamos las mochilas y fuimos a Casa Viñita donde nos presentaron unas esplendidas y elaboradas tapas a cual mejor, que si el solomillo al whisky, o al pedro ximenes, el pisto con huevo, la carrillera que se comió José María o las cuatro pelotas …perdón albóndigas que se repartieron Juan y Paco. Una vez acabamos nos dirigimos al coche para tomar café en la venta Restaurante La Piedra y regresar alegres y contentos por el buen día disfrutando de la naturaleza y buena compañía.